EL ACEITE DE OLIVA Y LAS ENFERMEDADES INFECCIOSAS
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Un estudio sobre los efectos protectores frente a infecciones que tienen las grasas del aceite de oliva virgen, el cual, se está llevando a cabo por el Grupo de Investigación Microbiología e Inmunológica de la Universidad de Jaén (UJA) y vinculado al Campus de Excelencia Internacional Agroalimentario (ceiA3), tiene como objetivo, investigar cómo afectan dichos componentes (grasas del aceite) a la actividad de los neutrófilos.

Los neutrófilos son células pertenecientes al sistema inmunológicos y tienen como responsabilidad defender al organismo frente a enfermedades infecciosas.

Gerardo Álvarez, responsable del grupo apunta que, en la dieta de las personas, la grasa está presente en al menos un 5% de la misma, por eso, debemos conocer cuáles son mejores para la salud. Los experimentos, llevados a cabo demuestran que las grasas del aceite de oliva son capaces de estimular las células del sistema inmunológico, consiguiendo de esta forma una defensa efectiva frente a infecciones. Todo lo contrario que ocurre con los aceites de pescados, pues provocan una sobre-estimulación de estas células defensivas, lo que provoca efectos negativos en ellas y suele terminar en la muerte. Pasado este tiempo, se ha sometido a los ratones a un tratamiento con la bacteria infecciosa Listeria monocytogenes para ver cómo reaccionaban.

Además, ha realizado el siguiente comentario, “Hemos alimentado a ratones con tres tipos de grasas, aceite de pescado, de girasol y de oliva, durante un mes, un tiempo considerable dado que la vida media de estos animales es de dos años aproximadamente”.

Los resultados obtenidos en los ratones tras el periodo de alimentación fueron los siguientes:

  • Aceite de pescado: Murieron rápidamente.
  • Aceite de girasol: Murieron en un término medio.
  • Aceite de oliva: Superaron la infección de la bacteria.

Álvarez de Cienfuegos ha subrayado que el grupo de UJA investiga también cómo actúan estas células en las personas con inmunosupresión (sistema de defensa inactivo). Normalmente este tipo de personas son, personas de avanzada edad, personas con diabetes o personas que reciben tratamientos terapéuticos o procesos de quimioterapia.

Las grasas del aceite de oliva virgen estimulan las defensas del sistema inmunológico, sin sobrepasar los límites, por lo tanto, son las grasas más saludables que podemos incorporar a nuestra dieta.

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