Viene el buen tiempo, y con él, la variedad de pescado azul fresco nos ofrecen una mejor calidad y precio. Y es precisamente ahora cuando comienza la temporada en que todos los pescados azules están más sabrosos. Y como es bien conocido, todos los pescados azules son un alimento muy nutritivo y beneficioso para la salud. Pero en muchos hogares los niños rechazan el pescado, las espinas son un riesgo para los pequeños, y también para muchos mayores. Y hay personas de todas las edades a las que, por sus situaciones particulares de salud, el pescado es un difícil alimento para tomar sin depender de la ayuda de otras personas mientras lo comen. Y esta situación merma en ellos el sentimiento de salud y autonomía del paciente. Y todo sentimiento de incapacidad merma la autoestima en cualquier ser humano. Sucede también que, en determinados lugares no siempre se consigue el pescado azul fresco deseado. Por eso estas conservas caseras nos vienen de perla porque, preparadas de antemano, son proteínas sanas, baratas y de muy buen remedio para plantear platos que gusten a toda la familia, les alimente bien, y les hagan disfrutar con precios asequibles. Nos puede servir atún, jurel, caballas en todas las variedades de esta amplia familia de los atunes, sardinas y en general cualquier otro pescado azul. Y siempre nos vendrá bien el aprovechar las ocasiones de mejores precios. Modo de hacer: Se pone agua a hervir en una cazuela, o una olla. Se le añade la sal, dos hojas de laurel y si se desea, alguna hierva aromática como por ej. Eneldo, orégano, hiervas provenzales, tomillo, etc. sueltos en el agua o mejor aún si se envuelven en una gasa atada o en forma de muñequilla para que no molesten. Y cuando empieza a hervir se echan los trozos del pescado y se dejan justo hasta de comienza de nuevo a hervir. También se puede poner el pescado limpio de tripas y lavado, pero entero. Una vez hervido se limpia cuidadosamente de piel y espinas. Escurrir muy bien y si es preciso, secarlos con papel de cocina. Nos aseguramos que no hay ni una sola espina en el pescado, manteniendo los trozos lo más enteros posible. Se ponen ordenadamente en un tarro de cierre hermético. Se cubre el tarro o tarros con Aceite de Oliva Virgen Extra Betis hasta arriba. Es el momento de añadirle si se desea, algo más hiervas y/o especiado como algo de laurel, ajo, una rama de eneldo y cerrar bien los tarros. Se ponen los tarros en una olla al baño de María con el agua fría y se ponen a calentar lentamente hasta que hierba el agua. Dejarlos hervir a poco fuego unos 15 minutos. Apagar el fuego y dejar enfriar a su aire. Guardarlos una vez fríos en lugar fresco y oscuro. Usar para preparar: - Ensaladas diversas. - Arroz blanco con verduras crudas picaditas y una o varias salsas o una vinagreta al gusto. - Para añadir en las ensaladas de patata veraniega. - Para mezclar con un sofrito clásico y rellenar unas empanadillas, unas berenjenas, unos pimientos, unos champiñones.. - Para hacer unos cuencos ovalados de media patata hervida con piel y tomarlas servidas en frío acompañadas de una salsa, o también las podemos gratinar adornadas con unas olivas negras y algo de queso rallado. - Para rellenar huevos duros. - Para preparar un delicioso bocadillo, aderezado con algo de lechuga, rodajas de tomate, pimientos, alcaparras. - Y para toda la familia, pero especialmente para los peques y personas con desgana o en situación delicada de salud, para aperitivos, este pescado ya listo nos sirve para crear unas deliciosas tortillitas de un solo bocado.. Tenemos así una estupenda fuente de una nutrición sana y completa. De disfrute y variedad gastronómica. Y una despensa lista para emergencias y prisas. Y no se olviden que este aceite de oliva si sobra, contienen deliciosas propiedades y siempre nos irá muy bien para poner en un guiso, una vinagreta.