Sentir que tenemos las manos resecas, ásperas y como si fueran un cepillo o una lija , es algo desagradable y molesto. Nos dificulta realizar tareas cotidianas. Por ello precisamos solucionarlo cuanto antes. El remedio es muy sencillo.
Ingredientes:
- Dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
- Una cucharada de jabón líquido.
- Dos sobres de azúcar.