En la cocina oriental podemos encontrar platos exóticos y fáciles de preparar, perfectos para sorprender a nuestra familia o deleitar a nuestros invitados. Es una comida muy sana y equilibrada en la que se utilizan mucho los vegetales y la pasta. A la hora de cocinar, antes que freír se prefiere la cocción al vapor, el guisado y el salteado. Para que probéis un plato de estas características os proponemos esta receta de pollo con verduras.

El pollo, ingrediente protagonista de esta receta, posee una de las carnes más saludables, siempre y cuando la consumamos sin piel. Además, contiene muy poca grasa y sus proteínas son muy fáciles de asimilar, por lo que es un alimento que está especialmente indicado para los niños, ancianos y todas aquellas personas que tengan el estómago delicado. Las verduras, son ricas en vitaminas, fibra, minerales y proteínas, por lo que nos ayudarán a mantener la salud cardiovascular.

Elaboración:

Comenzamos preparando el pollo, lo cortamos en dados de 2 cm aproximadamente y salpimentamos. Lo salteamos en la sartén con aceite de oliva Betis hasta que esté dorado y reservamos.

Lavamos las verduras, y cortamos en juliana el puerro, solo la parte blanca, las zanahorias y los ajos. En la misma sartén, añadimos un poco más de aceite de oliva Betis y salteamos las verduras con un poco de jengibre molido.

Cuando estén un poco tiernas las verduras, en unos 5 minutos, añadimos al agua, como un vaso y medio, y el vino de jerez (medio vaso). También añadimos la salsa de soja y el azúcar. Con una cuchara de madera removemos bien asegurándonos que todos los azúcares del fondo de la olla se despegan y se unen a la salsa.

Subimos el fuego y dejamos reducir la mezcla durante unos 20 minutos. Pasado este tiempo incorporamos el pollo y lo dejamos cocinar 5 minutos más para que el pollo tome todo el sabor de las verduras.

Podemos servir el pollo solo o acompañado de arroz hervido, como más te guste.

Nota: las cantidades indicadas son para 2 personas, cocción 30 min preparación 40 min.