La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que se da cuando las células dérmicas se acumulan en la superficie de la piel. Esta acumulación de células forman placas de piel gruesa, enrojecida y con escamas de color blanquecino que se localizan sobre todo en el cuero cabelludo, los codos y las rodillas, provocando un cierto quemor y picor. Puede estar causado por herencia genética, el estrés, el abuso del alcohol, el tabaquismo, el consumo de determinados medicamentos o las exposiciones prolongadas al sol, principalmente.

El  remedio natural que te proponemos puede ser muy útil a la hora de combatir sus  síntomas ya que reduce la inflamación de la piel, la hidrata y evita la descamación. Es muy sencillo de hacer, solo tienes que retira la piel de los dientes de ajo, para córtalos en trocitos muy pequeños que mezclaremos con el aceite de oliva virgen extra.  Con la ayuda de un disco de algodón impregnado con la mezcla la extenderemos sobre las áreas afectadas, masajeando la zona  con las yemas de los dedos hasta que la piel haya absorbido buena parte del aceite de oliva virgen extra. No aclares la mezcla con agua y deja que actúe durante el mayor tiempo posible, puedes repetirlo  2 o 3 veces al día.

El ajo posee propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que reducirán la hinchazón de la piel además evitará que se infecte, mientras que el aceite de oliva virgen extra, es fantástico para hidratar la piel y evitar la sequedad.

En el caso de que la psoriasis se encuentre en el cuero cabelludo es recomendable aplicar aceite de oliva virgen extra tibio sobre el cuero cabelludo y envolver la cabeza con una toalla durante una o dos horas. De este modo  eliminamos las escamas del cuero cabelludo para que los medicamentos tópicos puedan penetrar las placas. Si eliminamos las escamas de forma agresiva se puede romper la piel y producir una infección.