La trucha es un pescado muy apreciado por su sabor en nuestra tradición gastronómica, y la receta que os proponemos de hoy además de ser deliciosa es  muy sencilla de preparar.

Teniendo en cuenta que los expertos en nutrición recomiendan un consumo de pescado de cuatro veces por semana, se puede considerar esta receta como una buena opción para mejorar nuestros hábitos alimentarios.

La contribución nutricional de este plato se basa sobre todo en las proteínas de alta calidad. La cantidad de tejido conectivo del pescado es menor que el de las carnes, por lo que su "digestibilidad" es mejor, lo que da la impresión de ser alimentos más suaves y les hace aptos para incluirlos en dietas conocidas como "blandas" o de fácil masticación.

Las grasas que aporta son poliinsaturadas de la familia omega 3, que tienen una incidencia positiva en la prevención y tratamiento de enfermedades cardiovasculares, ya que ayudan a mejorar la circulación sanguínea, disminuyendo la fijación del colesterol a las arterias. Por lo tanto es un alimento que constituye una alternativa válida al elevado consumo de proteína de carnes ricas en grasas saturadas.

Elaboración:

Comenzamos preparando las verduras, limpiaremos las patatas las cortaremos por la mitad y las herviremos en agua con sal, el tiempo de cocción dependerá del tamaño de las patatas. Una vez lista las reservaremos.

Cortamos en tiras finas  la cebolla en pimiento y el puerro. En una sartén con aceite de oliva Betis pocharemos las verduritas a fuego lento. Cuando estén pochadas le añadimos los taquitos de jamón serrano y el vino blanco, y lo cocinamos hasta que se evapore el vino.

Sazonamos ligeramente los filetes de trucha, ya que  el jamón serrano va a dejar un sabor bastante salado. En una sartén con poco aceite Betis colocamos los filetes de trucha por el lado de la piel  y las marcamos hasta que la piel esté tostadita.

Para emplatar colocaremos como base las patatas hervidas y sobre ellas un colocamos un filetes de trucha apoyados por el lado de la piel, le ponemos por encima las verduritas pochadas con el vino blanco y el jamón, y finalmente volvemos a poner otra capa de filetes de trucha de modo que la piel quede a la vista.

Podemos atar los filetes con un poco de tiras de cebollino, así no se moverán tanto cuando las vayamos a comer, para ello previamente  cortaremos 12 tiras de puerros y los ponemos en el microondas durante  10 segundos a máxima potencia.

Como toque final, preparamos una ajada, laminamos ajo muy fino y lo  doramos un poquito en una sartén con aceite de oliva Betis. Cuando el ajo esté listo, le echamos un poco de pimentón, removemos y rociamos los filetes con la salsa.

Nota: las cantidades indicadas son para4 personas, preparación 40 min., cocción 25 min.