Hoy te proponemos una receta fácil y rápida de esas que te soluciona la comida en un santiamén, pollo a la naranja. Una buena opción para comer pollo con un sabor diferente, la naranja le aporta un matiz agridulce que te sorprenderá.

El pollo es uno de los alimentos más consumidos en la dieta mediterránea. Es muy completo nutricionalmente; destaca en él la presencia de vitamina B3, B9, B7, B12, A y minerales como el hierro, calcio, yodo, zinc, magnesio, sodio y fósforo. Es un alimento bajo en calorías, con apenas presencia de azúcar y grasa, aunque contiene colesterol (en poca cantidad) y purinas.

Las naranjas son un alimento rico en carbohidratos, calcio, potasio, yodo, fósforo, magnesio y sodio, además de vitaminas A, B9 y C.

Elaboración:

Comenzamos salpimentando las pechugas de pollo a nuestro gusto. En una sartén con un poco de aceite Betis, las doramos por ambos lados durante 5 minutos. A continuación añadimos dos cucharadas de vinagre balsámico, el zumo de naranja y el caldo de pollo, espolvoreamos un poco de romero y rectificamos el punto de sal si es necesario.

Llevamos hasta el punto de ebullición, todos los ingredientes y una vez conseguido, bajamos el fuego para que se vaya cocinando la carne, durante unos 7 minutos aproximadamente.

Añadimos ½ cucharadita de azúcar, la mantequilla y una cucharadita de vinagre balsámico. Subimos el fuego durante unos minutos, hasta que la salsa se reduzca un poco.

A la hora de servir ponemos el pollo en una fuente y por encima añadimos la salsa. Para decorar el plato añadiremos una cucharadita de semillas de sésamo, unos gajos de naranja y una ramita de romero.

Nota: las cantidades indicadas son para 4 personas, cocción 15 min preparación 30 min.